¿No será hora de replantear estos asuntos de la inversión que requiere armar un espectáculo? ¿No será hora de replantear qué valoramos de una murga?. ¿No será hora de empezar valorar por fuera de lo cuantificable en pesos?

Porque las risas,
Porque las caras,
Porque pintadas; dicen por qué…1-

Fue en noches de carnavales que nos pusimos a pensar ¿Cuánto cuesta sacar una murga, mamá? «Muncho, munchísimo». ¿En qué gasta tanto una murga? Sobre todo en trajes; vestimenta y maquillaje se llevan la mayor parte del presupuesto de un conjunto. Ni hablar de contrataciones de murguistas y técnicos.

| Satirizando a los académicos
La vestimenta y el maquillaje son características de la murga desde sus comienzos. El vestuario parodiaba a los músicos académicos, especialmente al director, y, con lo que se tenía de segunda mano, se resolvía desde una estética desenfadada y payasesca.
El rostro maquillado, con corcho quemado, completaba la caracterización original. No se pensaba en brillo ni magnificencia, sino que primaba lo satírico, a partir de cierta austeridad. Pero en algún momento del devenir histórico del género, empezaron a aparecer los brillos, la suntuosidad, las telas importadas, los diseñadores; en resumen una cadena de producción.

| La Murga Industrial
Los géneros cambian, mutan, se nutren de otras disciplinas y otros dispositivos culturales. Esto hace que el género no muera de sequedad; y un género tan omnívoro como la murga, no podía ser la excepción.
En una cultura que se fue globalizando, con el imperio de la imagen y el show, la murga, a finales del siglo veinte, fue asumiendo, a su medida y en su contexto, esa cuestión del espectáculo global. ¿Cómo escapar? Quizás, entre tanto discurso libertario, uno podría esperar una actitud más crítica con respecto a estos avasallamientos globales. Pero no.
Esto vino para quedarse, se instaló y desarrolló. Se acomodó, se quedó a vivir y goza de buena salud. La televisación del concurso de Montevideo no hizo más que potenciar esta tendencia. Desde el interior miramos la tele, como los prisioneros de la caverna, y asumimos que eso es la murga, que es el modelo a seguir, el arquetipo, la idea platónica.

| No todo lo que brilla es Murga
Es muy lindo ver a las murgas bien vestidas, luminosas, abuchonadas; juzgamos desde esos parámetros la calidad y puntaje en ese rubro. El problema es cuando acceder a esas vestimentas se hace una limitación que no tiene que ver con el talento, la creatividad, sino que depende del potencial económico. 2-

¿No será hora de replantear estos asuntos de la inversión que requiere armar un espectáculo? ¿No será hora de replantear qué valoramos de una murga? ¿No será hora de empezar a valorar por fuera de lo cuantificable en pesos?. Esto incluye, no solo el diseño y confección de vestuario, sino también la contratación de integrantes, técnicos, utilería. ¿Es necesario gastar tanto en el carnaval del interior? 3-

| Algunas Murgas están de Paco
El carnaval de Montevideo 4 – el televisado, porque hay otros — creo que no tiene marcha atrás. Es una industria muy potente, que emplea mucha gente, genera turismo. Creo que es una opción bien válida.

Yo me refiero al Otro, ese que se hace por el amor al género, el del interior, el que no entró aún a la máquina productora de mercancía. No digo que no se pueda hacer un mango, que de hecho se hace, digo que eso no debe ser lo que mueva la máquina. Hay otros valores que no cuestan tanto: la formación, la creatividad, el riesgo, la experimentación.

Este final se parece a esas reflexiones melosas y terrajas que ya forman parte del esquema de la murga Tenfield o murga Paco. ¿Hay necesidad de copiarlo? ¿Para qué?
Que la Murga no deje de mutar; pero tampoco dejemos de pensar el signo de estos cambios.

-1 Baile de más caras. Canción de Jorge Lazarof
–2 Entiendo que lo económico no debería pesar al momento de armar un espectáculo de Murga: cuánto brillo, cuánta fastuosidad, la grandilocuencia. Entiendo que también hay creatividad, talento y originalidad en conseguir dinero para el conjunto, pero prefiero que eso no sea una vara para medir un espectáculo de Murga.
-3 Estoy partiendo de la base de que gastar mucho no es sinónimo de calidad. Pensalo al revés. También funciona.
-4 Lo llamaré Carnaval Tenfield o Carnaval Paco.