Patrimonio > Mapa de Bienes Culturales de la ciudad de Salto
Por Diana Rosete | DTHyC – Cenur Litoral Norte
El crecimiento del turismo a nivel país en los últimos años es innegable, de acuerdo con los datos aportados por el Ministerio de Turismo (dejando de lado el último año de “pandemia”). Si bien el aumento en el número de turistas es importante, Salto necesita complementar su oferta turística centrada en sus aguas termales; para ello la oferta cultural de la ciudad es una alternativa de desarrollo que debe ser trabajada en forma sostenible e interpretada de manera accesible para los turistas.
El proyecto “Turismo Cultural en Salto: la diversificación de la oferta” fue financiado por el Programa Vinculación Universidad y Producción 2012, de la Comisión Sectorial de Investigación Científica (CSIC) de la Universidad de la República, y llevado a cabo por el Área de Estudios Turísticos de la Regional Norte Salto. La contraparte del proyecto fue la Dirección de Cultura de la Intendencia de Salto.
Hacemos hincapié que dentro el llamado “Turismo Cultural” aplica a una gran cantidad de opciones de consumo como visitar museos, galerías de arte, barrios históricos, ruinas, sitios arqueológicos, teatros… la gastronomía, o todo signo de identidad de un país o región, forma parte del turismo cultural. También es turismo cultural la convivencia con comunidades rurales, por ejemplo. Todas estas opciones de cultura pueden ayudar a que un destino se convierta en foco de atracción.
Salto cuenta con excelentes atractivos que permitirían una diversificación de la oferta tanto para la complementariedad de productos como en un rescate significativo de la identidad local. En este sentido, los mapas culturales se constituyen en documentos que permiten sistematizar la información cualitativa de un lugar y situar en un espacio geográfico los elementos que intervienen en las relaciones sociales, con su entorno y con ellos mismos.
En la actualidad es necesario revisar la gestión tradicional del patrimonio cultural para poder acercar la cultura a la población, reforzar la identidad local y darle un enfoque turístico, ya que éste es una alternativa que se debe tener en cuenta a la hora de pensar en la cultura de un lugar, dada su importancia como recurso para conseguir beneficios económicos.
Los retos de las políticas culturales son lograr compatibilizar sus funciones de conservación, promoción, investigación y divulgación, con las demandas turísticas, que exigen una interpretación de la cultura adaptada a los distintos segmentos de la demanda y a las nuevas formas de consumo.
La realización de un mapa cultural de la ciudad elaborado por la academia, permite reunir información de forma sistemática, para utilizarla en el proceso de decisiones y a su vez estar en contacto con los actores implicados. Es también una herramienta que permite conocer las diferentes lecturas de los ciudadanos sobre los recursos culturales e incorporarlos a las nuevas generaciones, logrando así el rescate patrimonial y mejorar la consideración social de la cultura.
La metodología propuesta fue de corte cualitativo, busca comprender tanto los significados de los discursos, como el de los documentos, con el fin de obtener el reconocimiento del patrimonio natural, cultural, material e inmaterial por parte de la comunidad, y la apropiación de este patrimonio para afianzar la identidad local. La realización del trabajo supuso sistematizar información recabada a través de entrevistas semiestructuradas a informantes calificados, con la intención de profundizar acerca de diversos aspectos que permitirán incorporar nuevas zonas de la ciudad, que posean atractivos y contengan un valor identitario, a la actividad turística.
Paralelamente se realizó un análisis documental de los registros escritos existentes y disponibles, con la finalidad de extraer las ideas más importantes allí expuestas, para realizar una valoración de la información y luego el desarrollo de los productos que contengan una significación positiva para la comunidad y que a su vez, generen un complemento de la tradicional oferta termal para los turistas.
La elaboración del mapa de bienes culturales de la ciudad de Salto se llevó adelante mediante una práctica colaborativa y participativa, entre la academia, el ámbito público y la comunidad. De esta manera, se fueron identificando aquellos bienes culturales con continuidad histórica y portadores de sentido de identidad a escala local.
Diversas disciplinas (Antropología, Arqueología, Sociología, Derecho, Geografía, Turismo e Historia) trabajaron con la finalidad de relevar y contribuir a la puesta en valor de los bienes culturales de la ciudad. Los bienes involucrados se potenciaron al recibir múltiples lecturas desde las diferentes disciplinas involucradas.
De este modo, se concretó el relevamiento y registro (escrito y fotográfico) de los bienes culturales, mediante el uso de fichas de diferentes categorías, confeccionadas especialmente para dicho fin. Se confeccionó el inventario digital de los bienes culturales seleccionados, georeferenciados y descriptos, adjuntando información en los diversos soportes existentes (escrito, sonoro, fotográfico, fílmico, etc.).
Los bienes culturales relevados fueron ubicados en un plano cartográfico. Para colaborar en su difusión se utilizó un mapa de la herramienta Google Maps, en donde se ubicaron los mismos, junto a una fotografía y breve descripción de los mismos, que incluye la información más relevante de toda la producida. Link al mapa: https://www.google.com.uy/maps/@-31.3648492,-57.989681,12z/data=!3m1!4b1!4m2!6m1!1s1h2cyqfRFoee-AZWjCS0Ay35m96s
Las categorías en las que finalmente fueron agrupados los bienes culturales seleccionados y ubicados en la Mapa fueron 9: Monumentos, Esculturas y Murales; Arquitectura; Arquitectura Religiosa; Monumentos Históricos Nacionales; Fiestas y Eventos; Patrimonio Inmaterial; Personajes; Parques; Plazas y Playas y; por último, Museos.
De este modo la ciudad de Salto ofrecerá nuevos escenarios donde se pondrá en valor el acervo cultural como un atractivo turístico.
En una próxima entrega presentaremos el circuito elaborado a partir de esta investigación llamado “La Aventura de la Forma y el Color. Safari urbano de observación de arte”.